El consumo de Agua de Mar por parte de deportistas suele considerarse por varios motivos relacionados con su composición rica en minerales y oligoelementos . A continuación te detallamos algunos de los motivos por los que algunos deportistas optan por incorporar plasma marino a su dieta :
Restaurar el equilibrio electrolítico
Los electrolitos , como el sodio, el potasio y el magnesio, son esenciales para el equilibrio de líquidos y electrolitos del cuerpo. Los deportistas, especialmente aquellos que realizan actividades intensas y prolongadas, pueden perder electrolitos a través del sudor. El Agua de Mar puede ayudar a restablecer este equilibrio, promoviendo una mejor hidratación y previniendo la deshidratación.
Prevención de calambres musculares.
Los electrolitos, particularmente el magnesio y el potasio , participan en la contracción y relajación muscular . Una deficiencia de estos electrolitos puede contribuir a los calambres musculares. El consumo de plasma marino puede ayudar a prevenir estos calambres aportando los minerales necesarios.
Apoyo a la recuperación muscular
Ciertos minerales que se encuentran en el Agua de Mar , como el calcio, son esenciales para la salud de los músculos y los huesos. Pueden ayudar a la recuperación después de un entrenamiento intenso promoviendo la regeneración del tejido muscular y fortaleciendo la estructura ósea.
Beneficios de los oligoelementos beneficiosos.
El Agua de Mar puede contener oligoelementos como zinc, selenio y cobre, que tienen propiedades antioxidantes. Estos compuestos pueden ayudar a reducir el estrés oxidativo resultante del ejercicio extenuante.
Mejora de la energía y la resistencia.
Los electrolitos, particularmente el sodio, son esenciales para mantener el equilibrio de líquidos en las células y participan en la transmisión de los impulsos nerviosos. Un buen equilibrio electrolítico puede mejorar la energía y la resistencia durante el ejercicio.
Es importante señalar que si bien el Agua de Mar puede aportar potenciales beneficios, es fundamental consultar con un profesional de la salud o un nutricionista antes de incorporarlo a la dieta, ya que las necesidades nutricionales pueden variar de una persona a otra dependiendo de diversos factores. como el tipo de actividad física practicada, la intensidad del entrenamiento y las características individuales de cada persona.